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Leisa espera que el Servicio Nacional de Salud británico asigne a su hijo un tratamiento gratuito de inyecciones quemagrasas. Cree que ya no es posible ayudarle con otros métodos. Debido a su exceso de peso y a su inmovilidad, Jason padece numerosas enfermedades potencialmente mortales.
Anteriormente, Ade Rai, tres veces campeón del mundo de culturismo natural de Indonesia, contó cómo trabajó con el «chico más gordo del mundo» y le ayudó a perder 114 kilos. El principal objetivo del entrenador era conseguir que el chico se moviera más, y lo consiguió.